Tarta de queso con membrillo


350 gr de queso crema (Philadelphia)
400 gr de nata (35% mg)
80 g de azúcar blanquilla
20 g de azúcar glas
80 ml de leche entera
4 láminas de gelatina
650 gr de dulce de membrillo


Cortamos aproximadamente la mitad del membrillo en laminas finas,  con las que cubrimos el fondo de un molde desmoldable. Nos sobraran unos recortes que reservamos.
Batimos el queso crema con el azúcar blanquilla 
Ponemos a hidratar la gelatina en un poco de leche fría, dejándola unos minutos, el resto de la leche se calienta y se añade la gelatina hidratada para disolverla. La mezclamos con el queso crema y el azúcar hasta obtener una mezcla homogénea.
Montamos la nata con el azúcar glas y vamos añadiendo poco a poco y con movimientos envolventes la mezcla del queso, añadimos los recortes de membrillo que teníamos reservados, cortados en cuadraditos ( si no nos llega, podemos cortar unos trocitos más del resto del membrillo) y vertemos esta mezcla sobre las láminas de membrillo que pusimos en el fondo del molde, introducimos en la nevera hasta que se cuaje perfectamente, unas 4-5 horas.
Una vez cuajada, hacemos la cubierta, hidratamos en agua la hoja de gelatina que nos queda.
Machacamos el membrillo que nos queda y lo calentamos al baño maría o en el microondas con dos cucharadas de agua, cuando esté caliente lo mezclamos con la hoja de gelatina hidratada, removemos bien y vertemos con cuidado esta mezcla encima del queso, dejamos enfriar para que cuaje bien de 3 a 4 horas, o de un día para otro. Adornamos con nueces.