Pastel de zanahoria y nueces

Decididamente este pastel es para disfrutarlo y de paso quedar bien con nuestros invitados, la zanahoria le da un sabor único y una textura muy jugosa que junto a las nueces y al glaseado de queso lo hacen irresistible. 



300 g de azúcar
3 huevos
300 ml de aceite de girasol
300 g de harina
300 g de zanahorias ralladas
100 g de nueces picadas
1 cucharadita de bicarbonato
1 cucharadita de levadura en polvo
1 cucharadita de canela en polvo
1/2 cucharadita de jengibre molido
1/2 cucharadita de sal
1/4 cucharadita de extracto de vainilla
Glaseado de queso:
300 g de azúcar glas
50 g de mantequilla
125 g de queso crema
Nueces y fondant para adornar




Primero preparamos el glaseado: Batimos el azúcar y la mantequilla con las barillas a velocidad media baja hasta que estén bien mezclados. Añadimos el queso crema de una sola vez y batimos hasta que quede completamente incorporado. Subimos la velocidad de la batidora y continuamos batiendo hasta que el glaseado esté ligero y esponjoso. Reservamos.
Ahora vamos con el bizcocho: Batimos el azúcar, los huevos y el aceite hasta que todos los ingredientes estén bien integrados, añadimos poco a poco la harina, el bicarbonato, la canela, el jengibre, la sal y el extracto de vainilla, seguimos batiendo hasta que todo esté bien mezclado.
A esta preparación añadimos las zanahorias ralladas y las nueces picadas y mezclamos manualmente con una cuchara de madera hasta que todo este bien repartido.
Repartimos esta mezcla en tres moldes de bizcocho de papel sulfurizado, horneamos unos 20-25 minutos, o hasta que al pincharlos salga limpio. Dejamos enfriar y desmoldamos.
Cuando estén completamente fríos, ponemos uno sobre una fuente para pasteles, extendemos por encima un cuarto del glaseado de queso, colocamos sobre éste otro bizcocho y así sucesivamente hasta colocar el tercer bizcocho que cubrimos con el resto del glaseado tanto sobre la superficie como sobre los lados.
Adornamos con nueces y  figuras de fondant.