Pularda asada con compota de lombarda
La Pularda, criada con todo mimo entre los muros del Monasterio de Santa Clara en Allariz, nos permite disfrutar de una alimentación completamente natural con una carne jugosa y exquisita.
1 pularda del convento de 2,5 k
800 gr de lombarda
3 cebollas
1 cucharada de azúcar moreno
2 vasos de cava
40 gr de piñones
1 manzana
1 diente de ajo
tomillo picado
50 gr de ciruelas pasas
50 gr de orejones
Patatas de guarnición
aceite de oliva
sal, pimienta
Lavamos la lombarda y la cortamos en tiras, pelamos dos cebollas y la manzana, descorazonamos ésta y cortamos ambas en láminas.
En una olla con dos cucharadas de aceite, una de azúcar, un vaso de cava, un vaso de agua y los piñones. Salpimentamos, tapamos y dejamos cocer a fuego muy lento unos 45 minutos. Destapamos y dejamos cocer otros 15 minutos más.
Pelar el ajo y majarlo en el mortero con una cucharada de tomillo y cuatro cucharadas de aceite.
Lavamos la pularda, salpimentamos por dentro y por fuera, la untamos con el majado y la dejamos macerar unas dos horas.La rellenamos con las ciruelas pasas y los orejones.
Ponemos la cebolla restante, pelada y cortada en rodajas en una fuente de horno, colocamos encima la pularda y las patatas, asamos durante una hora, regando varias veces con sus jugos. Vertemos el cava y continuamos la cocción durante otra hora. Servimos con la compota de lombarda.