Bizcocho de mandarina, polenta y nueces de macadamia

La Polenta se usa normalmente en Italia para platos salados, pero esta vez la vamos a usar para hacer un bizcocho, que al no llevar ni gota de harina tampoco tiene gluten. Queda un bizcocho con una textura muy blanda parecida a la del crumble que combinada con las nueces y el sabor cítrico de la fruta da lugar a un bizcocho delicioso.



4 mandarinas pequeñas con piel
170 gr de polenta
250 gr de mantequilla a temperatura ambiente
250 gr de azúcar
1 cucharadita de extracto de vainilla
3 huevos
1 cucharadita de levadura en polvo
150 gr de nueces de macadamia 
azúcar glas para espolvorear



Precalentamos el horno a 170º y cubrimos con papel sulfurizado un molde de unos 22 cm.
En un robot de cocina trituramos las nueces de macadamia, reservamos.
Ponemos las mandarinas enteras en un cazo, las cubrimos con agua fría, llevamos a ebullición y escurrimos las mandarinas. Repetimos este proceso tres veces más. Las dejamos enfriar, cortamos por la mitad y retiramos las pepitas si las hubiera. Trituramos las mandarinas, reservamos.
Mezclamos la mantequilla, el azúcar y el extracto de vainilla hasta que se forme una crema ligera y esponjosa, añadimos los huevos uno a uno y batimos bien la mezcla, sin dejar de remover vamos añadiendo la polenta, la levadura en polvo, las nueces trituradas y las mandarinas, Mezclamos bien todo junto  y vertemos que tenemos preparado y horneamos durante una hora o hasta que al introducir una brocheta, ésta salga limpia. Dejamos enfriar en el molde unos 10 minutos, desmoldamos sobre una rejilla y dejamos enfriar. Espolvoreamos azúcar glas por encima.