Bizcocho de laban



Laban es la versión árabe del yogur, a medio camino entre la leche y el  yogur, es una bebida elaborada a base de leche fermentada que entra dentro del grupo de los alimentos probióticos, como el kéfir.
Un alimento tan antiguo como sano, muy arraigado en la cultura gastronómica de los países árabes, el origen de este producto surge de la dificultad que estos pueblos tenían para conservar la leche y la necesidad de compensar ciertas carencias de proteínas y mitigar los efectos de las altas temperaturas.
Proviene sobre todo de la cocina libanesa y siria que se ha extendido a todas aquellas naciones de influencia árabe y por consiguiente, a todos los países a los que han emigrado estos pueblos, expandiendo así  su saludable y beneficioso consumo.



300 g de harina de repostería
300 g de azúcar
300 g de laban
150 g de mantequilla a temperatura ambiente
4 huevos
1 sobre de levadura royal
1 cucharadita de esencia de vainilla
azúcar glas para espolvorear



Batimos los huevos con el azúcar hasta que la mezcla blanquee, añadimos la mantequilla a temperatura ambiente, la esencia de vainilla y el laban, seguimos batiendo hasta que nos quede una mezcla homogénea. 
Poco a poco incorporamos la harina tamizada con la levadura mezclándolo todo muy bien.
Untamos un molde con mantequilla, incorporamos la masa anterior y horneamos 170º unos 35-40 minutos o hasta que al introducir una brocheta, ésta salga limpia, dejamos enfriar y espolvoreamos con azúcar glas.