Bizcocho de Limón con Semillas de Amapola

Este bizcocho queda muy jugosito al estar bañado con un almíbar de limón, además lleva semillas de amapola, un fruto negro y pequeño que se ha utilizado en la medicina natural desde hace mucho tiempo, en la actualidad las podemos ver cada vez más usadas en panadería y como complemento para mejorar nuestra salud, debido al papel que tienen como calmante nervioso del organismo.

85 g de mantequilla a temperatura ambiente
245 g de azúcar blanquilla
ralladura de un limón
15 g de semillas de amapola y un poco más para decorar
165 ml de leche entera
235 g de harina
2 cucharaditas de levadura en polvo
1/2 cucharadita de sal
3 claras de huevo
Almíbar de limón:
el zumo y la ralladura de un limón
50 g de azúcar
Glaseado de Limón:
el zumo de un limón
250 g de azúcar glas tamizado

Precalentamos el horno a 170º.
Ponemos la mantequilla, el azúcar, la ralladura de limón y las semillas de amapola en una batidora eléctrica de varillas y batimos hasta que todos los ingredientes estén incorporados, añadimos la leche poco a poco y seguimos batiendo hasta incorporarla completamente.
En un cuenco ponemos la harina tamizada con la levadura y la sal, añadimos esta mezcla a la de la mantequilla poco a poco y batiendo hasta que todos los ingredientes estén bien incorporados y la mezcla este ligera y esponjosa.
Batimos las claras a punto de nieve, las incorporamos con movimientos envolventes a la mezcla anterior. Introducimos en un molde en forma de anillo y horneamos unos 30 minutos o hasta que al presionar el bizcocho vuelva a su posición normal.
Para el almíbar de limón: mientras se hornea el bizcocho ponemos el zumo, la ralladura de limón, el azúcar y 100 ml de agua en un cazo pequeño, dejamos hervir hasta que el liquido se reduzca a la mitad y tenga una consistencia almibarada. Cuando sacamos el bizcocho del horno vertemos enseguida el almíbar por encima, dejamos enfriar en el molde antes de desmoldarlo sobre una rejilla para que se enfríe por completo.
Para el glaseado de limón: En un cuenco mezclamos el azúcar glas con el limón hasta que la mezcla este homogénea, agregamos  un poco más de agua o más azúcar para diluirlo o espesarlo, si fuese necesario.
Cuando el bizcocho esté frío, lo ponemos sobre una fuente, vertemos por encima el glaseado y decoramos con semillas de amapola.